3.29.2008

época

Y es como nacen y de a poquito crecen hasta que una primavera los alimenta
de un que se yo y un no se qué, un tanto de esto y un poco mas de
aquello y hace que se vea una alegría pasmosa que luego en recuerdos te
generan espasmos, es entonces cuando como un mero amor de verano que no
pretendía ser mas que lo banal que se transforma el sobrevalorado amor en la
vida, si, sobrevalorado, pero de a poco es como mi vida de arbol transforma el
valor agregado en un sentimiento que se supone ha de perdurar entregandome
sensaciones que sabes que no son las mismas, pero son iguales, y funciona a la
inversa también. Es cuando decides cambiar el color de las hojas que te
invadieron por completo, inundando hasta el ultimo suspiro que sale de ti con
colores que solo ves cuando vives en paz, es cuando te intranquilizas por no
tener el control de las cosas y aquel maravilloso color alegre se transforma en
un maravilloso color nostalgico lleno de suspiros azules y repletos de
segundos+minutos+horas vacías en las que no cuentas con su presencia... y le
miras completamente desnudo, sin hojas, sin prejuicios, sin culpas, sin mentiras
ni cobardias, ni mucho menos indecisiones y te preguntas por qué si no es
primavera le amas, por qué si es otoño se está rojo y no ocre,
por qué sientes que el invierno será mas azul que siempre... Y es
entonces que dices sin importar lo que ocurra, me debes dos estaciones
más.

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